miércoles, 14 de febrero de 2018

¡El momento es Ahora!

- Mensaje nº 1189 -

Hija mía. Mi querido hijo. Siéntate y escucha lo que Yo, tu amorosa Madre del Cielo, tengo que compartir hoy con los hijos de la tierra: Mis hijos. Mis tan amados hijos. Preparaos y no esperéis más, porque con cada día que pasa, estáis lejos de Jesús, con cada día que dejáis pasar, no os acercáis a Jesús, con cada día que no le dais vuestro Sí, permanecéis lejos de Él, y con cada día que no os comprometéis en amor con Él, ¡corréis el mayor peligro!

Quien no confiese a Mi Hijo, quien siga durmiendo y no se prepare para su Salvador, quien no le dé su Sí y simplemente deje pasar sus días de vida SIN prepararse para Jesús, que se lo digan: ¡El diablo no duerme!

¡Corres un gran peligro de quedar atrapado en sus redes, enredado y «arrullado» como en una tela de araña! ¡No te liberarás si no empiezas ahora a hacer algo por ti mismo! Debes convertirte para no perderte, y el momento para ello es ¡Ahora!

No os queda mucho tiempo , Mis queridos hijos que sois, porque la advertencia está cerca. Cuando haya llegado, será demasiado tarde para muchos de vosotros, así que preparaos mientras aún tengáis tiempo para ello, confesaos, expiaos, arrepentíos, para que podáis presentaros ante vuestro Salvador vestidos de pureza. Su presencia sólo puede «soportar» al que está lavado y preparado.

Por tanto, escuchad Mi llamada, hijos amados que sois, ¡y preparaos! No dejéis que el demonio os «atrape», porque vuestra alma sufrirá, y los tormentos que el demonio os tiene reservados serán de lo más crueles.

Así que escucha Mi llamada y ¡prepárate! Da tu Sí a Jesús y empieza a dirigir tu vida completamente hacia Él.

Pide siempre a Su Espíritu Santo conocimiento e iluminación, ¡para que puedas discernir! Ya hay mucha confusión en vuestro mundo, pero no la veis y corréis detrás de los equivocados.

¡Preparaos! Estableceos completamente en Jesús y confiad en Él, porque sólo Él es el camino hacia la gloria, sin Él vuestra alma se perderá y el demonio lo tendrá fácil con vosotros.

Así que escuchad Mi palabra y volved atrás, hijos Míos. Aún estáis a tiempo. Amén.

Con profundo amor.

Vuestra Madre del Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

Hija mía. Da a conocer este mensaje lo antes posible. Ya es hora para Nuestros hijos. Amén.