miércoles, 8 de febrero de 2017

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo

Mi Amado Pueblo:

MI Bendición no es Condicional, Mis Hijos la Reciben a Cada Instante.

Mi Amor es para todos; depende de cada persona si lo recibe o no. El pecador que logra arrepentirse, que logra abrirse y sentir Mi Bendición y por tanto Mi Amor, alcanza lo más grande que el hombre debe desear: SALVAR EL ALMA.

En este instante estáis trabajando en Mi Viña y no sólo experimentaréis los frutos en Mi Casa, sino que en la Tierra ya recibís bendiciones al ser los que repetís Mi Obra y Acción, logrando obtener la asistencia de Mi Casa. Mi Madre es incesante en Su bondad, os cubre, os da fuerza y os aleja de la tentación.

Mi Amado Pueblo, EN ESTE INSTANTE EL MAL YA HA DESpleGADO SU FUERZA CONTRA CADA UNO DE VOSOTROS , MI PUEBLO.

DE VOSOTROS, Mi PUEBLO . El desarrollo de esta fuerza está constantemente activo; no se detiene, vincula todos los elementos de la sociedad: la ciencia, la salud, las armas, la moral y la alimentación. Todo está vinculado y avanza constantemente para traer el mal sobre vosotros y para que retrocedáis en todos los aspectos, especialmente Mis hijos, frente a los que os atacan, no sólo en vuestra vida cotidiana, sino en vuestra personalidad y en vuestra espiritualidad. La mirada del mal está puesta en el ser humano como especie para haceros desaparecer.

El objetivo del mal no es detenerse, sino permanecer en acción constante, reproduciéndose para dañar en todo a la Humanidad. Por eso, hijos Míos, ante cada innovación debéis preguntaros: ¿cuál es el objetivo que ha motivado a la red del mal a crear esto para nosotros?

MI Pueblo En Verdad Hace Una Pausa Ante Cada Petición O Anuncio Mío Y NO

NO AVANZAN, NO REACCIONAN. El instante que desaprovecháis, el mal no lo desaprovecha, sino que lo utiliza para desviaros de lo que os estoy informando, de lo que os estoy advirtiendo y explicando, para que sintáis cada Palabra de Nuestra Casa difícil de atesorar en vuestros corazones.

SABED, hijos, que la pereza mental se ha apoderado de vosotros: nada es difícil si

mantienes el deseo de cultivarte interiormente. Por eso el mal actúa aceleradamente y el bien parece estar en estado de letargo. Dormís, descansáis, os dejáis llevar por la pereza y no estáis en acción, en movimiento, no tomáis iniciativas...

¡Despertad! Os he llamado para que os despertéis, para que salgáis de vuestro letargo, pero el mal sigue acelerándose, sin detenerse, pero vosotros, sí, os detenéis ante todo.

Hijos, el mal está activo, actúa de persona a persona, os toma a cada uno de vosotros y os enfrenta en una batalla personal; sabe cuál es la debilidad de cada criatura humana y la ataca sin cesar para hacerla caer.

ESTO NO DEBE SER UN OBSTÁCULO EN EL CAMINO ESPIRITUAL: Debes Reconocer El Mal Y No Darle La Oportunidad De Llevarte Al CAMPO DE BATALLA . Mis hijos son menos que

infantes, reaccionáis con tal infantilismo a la menor cosa que me avergüenzo de las reacciones de algunos de vosotros que no maduráis y que permitís que el mal os arrastre adonde quiera.

Continuáis con tal obstinación y egocentrismo que, sabiendo que necesitáis ascender, puesto que ya estáis en el periodo de preparación para el Aviso, negáis vuestra culpa personal y se la atribuís a los demás.

Hijos, ante Mí no podréis ocultar vuestra responsabilidad personal por cada obra y acto.

ESTO Es Una Tragedia Humana, Una Tragedia Porque No Practicáis Lo Que Oís, Ni Creéis Que Lo Que Estáis Oyendo O Leyendo Es Para Vosotros.

Mi Paciencia es infinita, ¡el tiempo para ti NO lo es ! Cuántas veces os he dicho que cada persona es responsable de sus actos! por eso os he llamado a crecer espiritualmente y a madurar en vuestra personalidad, acción y trabajo.

Hijos, no comprendéis que cuando estáis endureciendo vuestros corazones, estáis perdiendo la capacidad de ser benevolentes, de ser caritativos, de ser una bendición, y lo que es más grande: AMAR Y SER AMOR. Es entonces cuando ya no encontraréis la Curación.

Os llamáis cristianos y leéis Nuestra Palabra, pero permanecéis indiferentes... Os decís a vosotros mismos: «lo que estoy leyendo no es para mí» ... PENSÁIS ESTO Y NO ACTUÁIS CON VOSOTROS MISMOS, NO OS REPRENDÉIS, POR LO TANTO YO MISMO LO HARÉ...

Reprobaré Directamente A Quien Me Conozca Y No Cambie ...

Mencioné Que La Dureza De Corazón Llega A Un Punto En El Que Es Incurable. "Y

¿POR QUÉ? ¿Cómo Puede Cristo Decir Eso?"

PORQUE Me Conoce, Y Del Que Me Conoce Más, Pido Más, No Así

Del Que Ha Endurecido Su Corazón Y No Me Conoce; El Que NO Me

NO ME CONOCE Y Oye Mi Reproche Y Pide Ser Curado Tiene Mayor Oportunidad Ante Mí Que El Que Me Oye Continuamente Y Me Rechaza.

Veo hombres que han tomado la triste decisión de resistirse a esta explicación de Nuestra Casa y han decidido no dejarse conmover, por mucho que Yo les hable. Estas criaturas son como piedras de tropiezo; Yo les permito que continúen en su libre albedrío hasta que vean claramente por sí mismas lo que habían visto como oscuridad.

Los tropiezos existen, hijos Míos: que ninguno de vosotros llegue a ser un tropiezo, porque Yo actuaré dentro de Mi Justicia.

Quien se niega a escucharme y a reconocerme se está inmunizando contra Mi Palabra y Mi Amor.

No Te Sorprendas De Mi Severidad; En Ella Está Implícito Mi Gran Y Eterno Amor Por Cada Uno De Mi Pueblo.

ESTE Instante Es Extremadamente Delicado, Hijos: ¡Arrepentíos! No Vuestros Hermanos Y Hermanas Sino Vosotros ... Sí, Tú Que Estás Leyendo Mi Palabra: ¡Arrepentíos! Es Urgente.

Tienes que asumir la responsabilidad de cada acción; es fácil culpar a tus hermanos y hermanas de tus caídas personales. Si uno de vosotros cae, no es por culpa de otro, sino porque el que cae es débil y cae por su propia debilidad.

No veis cómo crecen las dificultades en toda la Tierra. Por una razón u otra, la agitación va en aumento; no se detiene ni se detendrá: la ira ha penetrado en la psique del hombre y éste reacciona prematuramente. Este no es un instante para reacciones impropias, en este instante Mis hijos necesitan haber madurado para resistir al mal.

Rezad, la oración es poderosa, no descuidéis el Santo Rosario, recibidme debidamente, no olvidéis que la Ley Divina está en el Eterno Presente, los Mandamientos no están sujetos a reformas. Mi Pueblo debe conocerme para vivir en Mí.

Orad, hijos Míos, orad por Mi Iglesia, la agitación crece junto con la división. Mi Iglesia seguirá agitándose, Mi Pueblo debe permanecer unido en Mi Amor.

Rezad, hijos Míos, rezad, la gran Nación del norte será presa del terror, la mano de hierro se detendrá tras el sufrimiento de Mis hijos.

Rezad, hijos Míos, rezad, el hombre está desanimado por la caída imprevista del dios del dinero.

Rezad, hijos Míos, rezad ante la amenaza; la acción inicia el sufrimiento de la Humanidad.

Rezad por Chile e Italia, se estremecerán. Donde no ha temblado, la tierra temblará.

Mi Amado Pueblo, Yo Me manifiesto en la criatura humana, cuando la criatura se deleita en Mí, cuando se aquieta para no caminar por su cuenta, aquietándose sin banalidades corriendo por su mente.

Sed sabios, hijos, cumplid lo que os pido, observad y cumplid Nuestra Ley Divina: Los Mandamientos. No olvidéis que la razón conduce a la inteligencia para que cumpláis Nuestros Mandatos y así, junto con su cumplimiento, obtendréis la Sabiduría necesaria para que los cumpláis, pues es cuando os separáis de la Sabiduría cuando caéis en los errores y, por tanto, en lo que está mal.

Mi Pueblo debe ser fiel y verdadero.

Mi Pueblo espera en Santa Paciencia, pero siendo activo.

Enviaré Mi Ángel De Paz, No Te Dejaré Solo En Medio De La

Manadas De Lobos Vestidos De Ovejas, Seguidores Del ANTICRISTO . Con Mi Ángel de

Paz reforzaré lo que Nuestra Voluntad ha indicado sobre la familia, Él permanecerá dentro de una familia.

Mi Corazón está continuamente lacerado por los millones de abortos que se permiten. Estos permisos no sólo son la degeneración del hombre como ser humano, sino que impiden al hombre evolucionar en su espíritu.

Mis hijos no sólo deben rezar ante el altar del Templo; cada persona es un Templo del Espíritu Santo, y como tal debe permanecer en Paz. Quien no actúa así, falta gravemente a Mis ojos.

Hijos, en Mi Casa os acojo a todos. La condición: ser aquellos que cumplen Nuestra Divina Voluntad. No sois niños abandonados, sois niños advertidos.

Así como Yo os amo, vosotros debéis desear y necesitar la explicación de esta Palabra Divina. No os estremezcáis, obedeced. No os extraviéis, caminad en la rectitud de obrar y actuar como Mis verdaderos hijos.

Os Llamo: Volveos a Mí.

Te Amo: Ama Como Yo.

Os Señalo El Camino Poco A Poco: Decidíos A Seguirme.

Te Bendigo, Ven a Mí.

Tu Jesús.

SALUDO María Purísima, Concebida Sin Pecado