domingo, 14 de enero de 2018

Mensaje de la Santísima Virgen María

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado:

VOSOTROS Sois el Pueblo de Mi Hijo, El Pueblo Que Es Bienaventurado Cuando Vive, Trabaja Y Actúa En La Divina Voluntad.

¡Todos merecen la Vida Eterna! De ahí Mi Llamada constante para que reavivéis voluntariamente el Amor de Mi Hijo que habita en vosotros y así podáis ser instrumentos obedientes en manos del Alfarero Divino.

Caéis, tropezáis, os levantáis y continuáis cometiendo graves errores al negaros a encontrar las enseñanzas que están implícitas en cada tropiezo, voluntario o no. Es el hombre el que cae y continúa en los mismos errores por no recapacitar.

No conocéis, no os gusta, no queréis, no anheláis el Amor de Mi Hijo: creéis que amáis a Mi Hijo. Os invito a mirar en vuestro interior, os invito a mirar vuestras obras y actos... ¡Sois Templos del ESPÍRITU SANTO! (cf. I Cor. 3,16).

Un mal muy grande está corroyendo el organismo espiritual del hombre; le debilita, le hace ser débil en todos los aspectos de la vida.

Un mal muy grande está provocando el estancamiento del hombre en el crecimiento espiritual.

Un mal muy grande permanece oculto a quien lo padece, y cuando sale a la luz, ha devastado a hermanos y hermanas, ha destruido, separado, desunido, ha herido a otros hermanos y hermanas, así como a quien lo padece...

El hombre que sufre este mal señala a sus hermanos y hermanas, pero no reconoce su mala acción o conducta. Éste es el gran mal del hombre en este instante: no quiere ser corregido, no permite que se le señale un error, pues quiere vivir el Evangelio a su conveniencia, pero, como los fariseos, acusa y no aplica en su vida lo que predica (cf. Mt 23,1-3).

ESTE MAL tan grande es la soberbia (cf. I Jn 2,16, Prov. 14,3, 11,2).

Es el mal que envenena lentamente al hombre, pues quien lo padece no acepta que lo padece, porque no lo ve.

COMO MADRE, quiero que os analicéis y reconozcáis si padecéis este mal:

¿No te sometes a ninguna instrucción?

¿Impones tu voluntad a pesar de que ello signifique perder a los que forman tu propio metro cuadrado?

¿No cumples lo que dices a los demás?

¿Eres exigente con tus hermanos y hermanas, pero no contigo mismo?

¿Necesitáis ocupar el primer lugar y llevar la cuenta de todo en lo que os implicáis?

¿Culpáis a los demás de los errores que cometéis?

¿No sabéis pedir perdón y sois implacables?

¿Te gusta sentirte querido y admirado, pero eres incapaz de querer o admirar a un hermano o a una hermana?

¿Eres parcial en lo que te conviene?

¿Eres implacable ante los pensamientos de otros hermanos y hermanas? ...

¡CUÁNTAS PÁGINAS Tendría Que Exponer Para Que Os Analizarais Vosotros Mismos! He Priorizado Lo Relacionado Con Vuestros Hermanos Y Hermanas, Con La Fraternidad.

Amados hijos, vivís con tantas deficiencias espirituales por no preocuparos de ser mejores. Cada instante os lleva a magnificar vuestro «ego» y a inmunizaros contra el Amor.

Quien rechaza el Amor se aleja de la fuente de la Santísima Trinidad. La falta de amor conduce a la impiedad, a la inquietud, a las carencias en todos los ámbitos y, por tanto, quien mantenga esta carencia esencial en su vida, para dejar atrás las cadenas que le impiden tener un corazón de carne, perdonar o perdonarse, debe hacer un firme propósito de enmienda, para que pueda tener alas espirituales para escalar las alturas.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado:

EL Diablo no ama la bondad, no quiere que cambies lo que te ata y te impide caminar.

La estrategia del demonio es alimentar la aversión, alimentar el orgullo, la impiedad, la falta de respeto a las normas. Al demonio le complace veros transgredir la Ley de Dios, le complace que os convirtáis en criaturas que hieren, azotan, matan, destruyen a vuestros hermanos y hermanas.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, en medio del hambre, del dolor, de la enfermedad, de los sacrificios, de la espera, de la angustia del tropiezo, del egoísmo ajeno, del maltrato, de las acusaciones, de la injusticia... Tienes aquello de lo que carecen los que te oprimen, alentados por el mal.

Tienes el Gran Tesoro del Amor, que vence lo que el hombre cree IMPOSIBLE ( cf.

Col. 3,14, I Cor. 13,2 y 13).

El AMOR Engrandece Lo Pequeño; Hace Necesario Lo Que Aparentemente Es Innecesario. Alivia la enfermedad; recompensa el sacrificio; calma la angustia; vence el egoísmo. Te Proporciona El Bálsamo Que El Amor Divino Da A Los Que Aman

LO...

La falta de Amor en este instante es el resultado del continuo rechazo que satanás ha insertado en la mente de algunos de Mis hijos hacia sus hermanos y hermanas, pero lo que es más grave, hacia la Divinidad.

Las malas instrucciones y los conceptos permisivos e impropios de algunas ideologías han endurecido los corazones para que se manifiesten contra todo lo que es bueno, y así el demonio ha conseguido que el hombre mancille lo que es Sagrado.

El diablo teme el bien, y vosotros, al no obrar ni actuar en el bien, os convertís en los impulsores del mal. Debéis ser conscientes de ello y no ayudar a que el mal se expanda, sino que, por el contrario, seáis vosotros los que expandáis el bien por toda la Creación.

Veo que Mis hijos se contentan con buenas intenciones formadas en la mente. Dolorosamente, esto se convierte en una abstracción espiritual: todo queda en el intelecto y no lo lleváis a la realización concreta por no tener una voluntad fuerte y decidida de hacer de la intención un pensamiento constante y fuerte que se concrete en un acto real. Vivís en la ambigüedad de la interpretación a vuestra conveniencia.

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, alimentaos de bien, buscad el bien, tened hambre de bien y sed de compartir el bien con vuestros hermanos y hermanas.

Os he llamado a conocer profundamente a Mi Hijo; si no veis a Mi Hijo en vuestro hermano o hermana, no conoceréis profundamente a Mi Hijo.

ESTE ES EL INSTANTE DE PONER EN PRÁCTICA LO QUE DICE LA Sagrada Escritura (Cf. I Tim 3,16).

EN ESTE Instante Estás Especialmente Entregado A Lo Que El Mal Ha Tejido Para Arrastrar A La Humanidad Hacia La Pérdida De La Vida Eterna.

Sé Fuerte En Amar Como Dios Te Ama Y Débil En El Amor Que El Mundo Enseña ( Cf.

Jn 3,16).

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, la Naturaleza golpea la tierra con fuerza. La tierra tiembla con fuerza como si quisiera desalojar el mal.

Estados Unidos continúa sufriendo y Europa sigue siendo azotada por el terrorismo.

Italia y España sufren por el hombre y por la Naturaleza.

El mar está agitado, el barco está agitado, la oración es necesaria.

MIS Amados, no os revelo esta Palabra para que la leáis y la olvidéis, sino para que la pongáis en práctica y seáis así más piadosos y menos mundanos ( cf. Santiago

1:22).

Mi Corazón es el refugio del hombre. No temas, Yo intercedo por ti, Yo te bendigo.

Madre María

SALVE María Purísima, Concebida Sin PECADO

SALVE María Purísima, Concebida Sin Pecado

SALVE María Purísima, Concebida Sin Pecado