lunes, 26 de marzo de 2018

Lunes, 26 De Marzo De 2018

Lunes 26 de marzo de 2018

Jesús dijo «Pueblo mío, realicé muchos milagros para que los apóstoles y el pueblo pudieran ser testigos de Mi poder de curar cuerpos y almas. El hecho de resucitar a Lázaro de la tumba fue lo que más dio a conocer Mi poder y, como resultado, muchos llegaron a creer en Mí. Las autoridades y los líderes religiosos se sintieron más amenazados por la cantidad de gente que Me seguía. Por miedo a que la gente creyera en Mí, los fariseos conspiraron para matarme, e incluso también a Lázaro. El plan de matar a Lázaro demostraba cuánto Me despreciaban. Éste es el comienzo de la Semana Santa, y ruego a Mi pueblo que asista al Triduo de esta semana santísima del Año de la Iglesia. La Última Cena del Jueves Santo fue la primera Misa, y Mi institución de Mi sacramento eucarístico. Es esta transubstanciación del pan y del vino en Mi Cuerpo y Sangre lo que os da Mi Presencia Real entre vosotros. Alabad y dad gracias por Mi muerte en la cruz para traer la salvación a todos los pecadores. Es vuestra respuesta creer y actuar según Mi Palabra».

Jesús dijo: «Hijo mío, estás contento de que funcione tu pozo de agua, y has hecho instalar aislamiento extra en tu desván y en tu habitación familiar. Tuviste un problema con la bomba de tu pozo cuando el disyuntor estaba desconectado. Cuando utilizabas el calentador en el mismo circuito, el disyuntor consumía demasiado. Necesitas una línea dedicada conectada a tu panel solar, o no tienes otros dispositivos que consuman mucha corriente para la toma que estás utilizando. Una vez que tengas instalada la bomba manual para el pozo, habrás completado Mis peticiones por ahora para tu refugio. Cada vez que hagas una práctica, aprenderás más sobre cómo hacer que las cosas funcionen para tu refugio. Da gracias porque te he dado todo lo necesario para tu supervivencia, y lo multiplicaré todo también para tu pueblo. Muchas de las cosas que te he pedido que hagas por tu refugio, podrían aplicarse a otros refugios. Recuerda que en tu refugio se necesita oración las veinticuatro horas del día para tu protección durante el tiempo de la tribulación.»