viernes, 1 de septiembre de 2017

Viernes, 1 De Septiembre De 2017

Viernes, 1 de septiembre de 2017: (Primer viernes)

Jesús dijo «Pueblo mío, en el Evangelio de hoy estáis viendo otro mensaje para que veléis y estéis preparados para la tribulación que está a punto de llegar. Conocéis la parábola de las cinco vírgenes prudentes y las cinco vírgenes necias que esperaban al Esposo en las bodas. Las cinco vírgenes prudentes prepararon sus lámparas de aceite comprando aceite extra. Las cinco vírgenes necias no compraron aceite extra, y se quedaron fuera del banquete cuando fueron a comprar el aceite. Esto es similar a la práctica de correr por los refugios cuando llenaron sus lámparas con aceite suficiente para alumbrarse por la noche. El mensaje principal de las catástrofes naturales de América es que te «Arrepientas» de tus pecados. Estáis siendo castigados por vuestros pecados, porque no estáis convirtiendo vuestras vidas para seguir Mis Mandamientos. Habéis visto cómo el pueblo de la época de Noé sufrió el diluvio, y el pueblo de Sodoma fue castigado con fuego y azufre. Permitiré que el Anticristo castigue al mundo con una breve tribulación, mientras Yo protejo a Mi pueblo en Mis refugios. Por eso quise que Mis grupos de oración hicieran un ensayo para ver cómo sería vuestra vida en los refugios. No tengáis miedo de este tiempo, porque no os dejaré huérfanos, sino que Mis ángeles os protegerán y os multiplicaré lo que necesitéis».

Dijo Jesús: «Pueblo mío, quiero que tengáis a alguien apuntado para cada hora del día y de la noche, porque tendréis Mi Hostia consagrada con vosotros en Mi custodia durante la tribulación. También recibiréis la Sagrada Comunión, cada día, de un sacerdote o de Mis ángeles. Estaré Presente contigo todo el tiempo en Mi Hostia. Donde tengáis Mi Presencia, tendréis también al Espíritu Santo y a Dios Padre. Las llamas de vuestras velas y lámparas de aceite representan el poder del Espíritu Santo, y Él os fortalecerá con Sus dones. Durante vuestro tiempo de tribulación, rezaréis más y aprenderéis a vivir juntos como una familia cristiana. Os estaré ayudando multiplicando vuestros alimentos, agua y combustibles. Estáis viendo los acontecimientos a vuestro alrededor que podrían desembocar fácilmente en una ley marcial. Puede que algunos os critiquen por vuestros preparativos, pero cuando perdáis la electricidad, seréis como las vírgenes prudentes que se prepararon para la venida del Novio en Mí. Reza por las almas que necesitan ser salvadas, especialmente por las almas de tu propia familia».