miércoles, 7 de noviembre de 2018

Reza mucho y vive en santidad. ¡El amor es santidad! Ámame y ama lo que yo amo

(Nuestro Señor Jesucristo) Queridos hijos míos, Yo, Jesús, vengo hoy en el Aniversario Mensual de mis Apariciones con mi Santísima Madre para deciros: ¡Volved a mí por el camino del Amor! ¡Es el Amor lo que busco en vuestros corazones! Y sólo cuando el Amor exista verdaderamente en vosotros y reine en vosotros, podré entrar en vuestros corazones y reinar completamente en ellos sin que nada obstaculice o se oponga a la obra de Mi Gracia en vosotros. Volved a Mí por Amor, pues es el Amor, hijos Míos, lo que os hace semejantes a Mi Sagrado Corazón, que es todo Amor. Sólo a través del Amor podéis agradarme, agradar a Mi Padre y ser verdaderamente templos de Mi Espíritu Santo. Rezad ahora más que nunca, trabajad para dar a conocer Nuestros Mensajes, pues la guerra contra Nuestro enemigo aún no ha terminado. Y cada día aleja más y más almas de Mí y de Mi Madre. Sí, Nuestros Dos Corazones sufren. El Corazón de Mi Madre como el Mío son atravesados cada día por una gran espada de dolor al ver cómo Nuestros hijos se alejan de Nos, seducidos por los nuevos ídolos que esta humanidad ha construido, ante los que se arrodilla para adorarlos en Mi lugar: los ídolos del placer y del dinero. ¡Sí! La humanidad traiciona Mi Amor cometiendo esta idolatría y repitiendo el mismo pecado de Adán y Eva: el de querer tener el poder absoluto y supremo que sólo Me pertenece a Mí, amándose a sí mismos más que a Mí, vuestro Dios. Y buscando una vida de idolatría, de placeres, sustituyéndome por una falsa divinidad, que es fruto de la maldad del ser humano, del orgullo humano que aún hoy quiere colocarse por encima de Mí y decretar Mi muerte. ¡Pero Yo estoy vivo! Y estoy vivo y sigo actuando por la Salvación de la humanidad. Por eso, Yo mismo castigaré a la humanidad que no quiso escuchar a Mi Santa Madre Aparecida en Heede. Sí, castigaré a la humanidad porque no obedeció los Mensajes de Heede, porque no escuchó los Llamamientos de Nuestros Mensajes dados allí. Por eso vendré con el fuego de Sodoma y Gomorra. El mismo fuego que arrojé sobre esas ciudades rebeldes, y reduciré a la nada todos los ídolos que la humanidad ha construido para adorar en Mi lugar. Y entonces veréis aparecer ante vosotros la Nueva Humanidad, el Nuevo Cielo y la Nueva Tierra. Estad prevenidos, hijos Míos, porque este Tiempo no será advertido y sorprenderá a muchos en las tinieblas del pecado. ¡Rezad! Para que no estéis en su número, pues será terrible ser quemados con un fuego que nunca se extinguirá, con un dolor que nunca acabará. Y que ningún remedio podrá aliviar. ¡Reza! ¡Reza mucho y vive en la Santidad! ¡El Amor es Santidad! Ámame y ama lo que Yo amo, haz Mi Voluntad, desprecia la tuya. Ésa es la Santidad que quiero de ti. Reza cada día el Rosario de la Misericordia y ofrece todos tus sufrimientos por la salvación de tantas almas necesitadas. Marcos, mi querida alma reparadora, te agradezco el Sacrificio de anoche de tanto dolor que me ofreciste por la Salvación de las almas. Sí, anoche salvaste 389.000 almas hijo mío. Sí, muchas eran de moribundos a los que Yo arrojaría al Infierno si no fuera por su Sacrificio que alcanzó para ellos, al menos, el fuego del Purgatorio. Estas almas están salvadas, ¡tú las salvaste! Sí, las has salvado, las has salvado a todas, hijo mío. Continúa, pues, ofreciendo el Sacrificio por tantas almas necesitadas, por la conversión de tantos pecadores alejados de Mi Corazón. Sí, has hecho que Mi Gracia baje a la tierra y toque el alma de muchos pecadores que ya empiezan a ver la Verdad y a volver a Mí. Ofrece Hijo, ofrece Sacrificio, pues es la única forma de salvar a tantos de Mis hijos que están al borde del Precipicio. Continúa ofreciendo también por tu Padre Espiritual, a quien sé que amas más que a nada. Que amas más que a ti mismo y también por esa alma en particular. Mi Gracia se está preparando y tu padre cosechará Gracia, Victoria, Alegría en abundancia. Te lo prometo. Y también sigue ofreciendo por Mis Planes y los Planes de Mi Madre, porque Satanás realmente quiere impedir Nuestra Victoria en Brasil y en el mundo, ¡pero con tus sacrificios no lo conseguirá! ¡Adelante! Yo estoy con vosotros, Yo soy vuestra Fuerza, vuestra Paz y vuestra Herencia, Yo soy vuestra Corona. A todos bendigo con Amor, desde Paray-Le-Monial, desde Heede y desde Jacareí.

(María Santísima): «Queridos hijos, hoy en el Aniversario Mensual de mis Apariciones os digo: ¡Soy la Reina y Mensajera de la Paz! Yo soy la que trae la Paz al mundo. ¡Rezad! Rezad mucho para que Mis Planes se realicen y se completen, pues Satanás es fuerte y de todas las maneras quiere atacar Mis Planes y destruirlos. Así que rezad sin descanso, porque con la Oración del Rosario, del Rosario que os he pedido aquí, Satanás puede ser desarmado hasta que se vuelva completamente impotente. ¡Vivid en el Amor, hijos Míos! ¡Vivid en el verdadero Amor! Para que el Amor pueda transformarlos cada vez más en las Rosas Místicas del Amor que he venido a buscar aquí. ¡Rezad! Para que tengáis Amor. Y así, a través del Amor, podáis conocer al Dios del Amor que vine a traer y hacer que todos os encontréis con Él en un abrazo amoroso. Sólo cuando viváis en el Amor, viviréis en la Santidad. La Santidad es el Amor en las obras. Por eso, hijos Míos, ¡abrid vuestros corazones al Amor, para que vuestra vida sea un acto incesante de Amor que enseñe al mundo lleno de pecado, odio y maldad, a vivir finalmente en el Amor Divino, en el Amor Puro de Transformación, en el Amor de Dios! ¡Reza el Rosario todos los días! Rezad por Mis Planes y ahora Mis hijos intensificad vuestras oraciones. Haced un Cenáculo cada 17 de cada mes para aumentar el poder de la oración y de la intercesión por la Salvación de la humanidad. Que recéis el Rosario de mi Llama de Amor en este Cenáculo. Para que Mis hijos sientan aún más Mi Amor y comprendan la Aflicción de Mi Corazón Inmaculado por la pérdida de tantos de Mis hijos y por el destino de la humanidad. Aquí en Jacareí di las maravillosas Señales el 7 de Noviembre de 1994, pero desgraciadamente los corazones no han cambiado. Por eso Mi Hijo enviará un gran Castigo a toda la humanidad, porque permanece incrédula, obstinada en el pecado, obstinada en la rebelión contra el Señor. Aún hoy repiten el mismo pecado de Adán y Eva: que se amaron más unos a otros que a Dios y quisieron ocupar el lugar de Dios, siendo ellos mismos los dioses de sí mismos. La humanidad que sigue caminando por las sendas de la destrucción, de la perdición, está dando grandes pasos hacia el Abismo. Y ahora hay que aumentar las oraciones y los sacrificios para que las almas puedan salvarse. Por eso, hijos Míos: ¡orad! ¡Rezad sin descanso!

-17 Dad también, 28 grabaciones de Mis Mensajes n° 19 que hizo Mi hijito Marcos, para que Mis hijos conozcan cuanto antes Mis Llamadas Maternas y sepan también cuánto los ama la Madre del Cielo y quiere salvarlos a todos llevándolos a todos al Cielo. Orad, hijos Míos. Dad 9 discos del Rosario de Lágrimas Meditado n° 21 a Mis hijos. Que conozcan Mis Dolores, que consuelen a Mi Corazón Inmaculado. Y dad a todos, a todos Mis hijos, todavía este mes, 13 Medallas de la Paz. Para que pueda así llevar Mi Gracia Milagrosa, la Gracia Amorosa de Mi Madre, a Mis hijos, y así disminuir en ellos la influencia de Satanás y hacer descender sobre ellos el Rocío de la Gracia, del Amor y de la Salvación del Señor. A todos bendigo con Amor ahora de Fátima, Heede y Jacarei».

Mensaje Privado De María Santísima Para Su Amado Hijo Carloss Tadeu:

(María Santísima): «Querido hijito Carlos Tadeo, hoy es el día en que te doy un Mensaje especial. Aquí lo tienes: Hijita Mía: ¡No temas! Mamá está contigo. Estoy muy contenta, con tus oraciones y tus sacrificios, pero debes moderar un poco tus sacrificios, porque te necesito para realizar grandes Planes de mi Corazón y salvar más almas. Hijo mío, en este mes de noviembre en adelante, explica a Mis hijos la Consagración a Mi Corazón Inmaculado, qué es estar verdaderamente consagrado a Mi Corazón Inmaculado. Y también quiero que hables a todos Mis hijos de Mis Mensajes dados en Tre Fontane, quiero que hables a todos Mis hijos del Amor que les tengo, del deseo que tengo de salvarlos a todos, del valor y la importancia del Santo Rosario. También quiero que hables mucho de Mi Madrecita Mariana de Jesús Torres y de los Mensajes que le di en Quito. Para que Mis hijos, conociendo aún más profundamente los Dolores y el Amor de Mi Corazón Inmaculado, se unan a Mí y a toda la Corte Celestial para luchar por la Salvación de la humanidad y de tantas almas necesitadas. Deseo, mi querido hijito, que tú también medites en el Amor de Dios con una meditación especial y particular que te dará mi hijito Marcos, tomada de los escritos de mi hijito Francisco de Sales. Esta meditación te ayudará a crecer en el verdadero Amor al Señor, a Mí y también a toda la humanidad. Os deseo que los dos últimos viernes de este mes descanséis y permanezcáis en íntima y profunda oración Conmigo. Tengo mucha Paz, tengo mucha Gracia, tengo muchas Luces que comunicarte. También deseo, hijito mío, que en los cenáculos de todo este mes de noviembre entregues a Mis hijos la Medalla de Mylagrose, hables de ella y expliques a Mis amados hijos cuánto amo a los que llevan la Medalla que regalé a Mi hijita Santa Catalina. Y cuánto verdaderamente muestro en ella todo Mi Poder al pisar la cabeza de la Serpiente Infernal. Y que Mis hijos aprendan de Mi hijita Santa Catalina la manera perfecta de amar y servir al Señor y a Mi Corazón Inmaculado. Deseo también que en este mes de Noviembre, regaléis 23 Rosarios de Lágrimas a Mis hijos y les enseñéis a rezarlo, porque a través de él recibirán grandes Gracias de Mí y muchas Bendiciones serán derramadas a las personas que reciban los Rosarios de sus manos.

Quiero que sepas también hijito mío: - Que cuando estaba en Egipto, algunos soldados sospecharon una vez que Yo no era de allí, por Mi aspecto y las formas de vestirme, intentando seguirme. Vieron la casa donde vivía con José y mi hijo Jesús. Buscaron información sobre nosotros y descubrieron que en realidad no éramos de allí. Entonces Mi enemigo les incitó a averiguar de qué país éramos. Cuando descubrieron que éramos de Palestina, decidieron informar al rey Herodes de que había compatriotas suyos viviendo en Egipto, escondidos, en secreto. Empecé a temer por la vida de mi niño Jesús, pero cuando el Señor me pidió este sacrificio, me pidió que lo ofreciera por vosotros, por vuestras intenciones, lo ofrecí con todo el Amor de mi Corazón Inmaculado. Y entonces, cuando el mensajero que se dirigía a Tierra Santa, Palestina, para avisar a Herodes de dónde Nos encontrábamos, fue rodeado por San Miguel. Y éste, tocándole la cabeza, le hizo olvidar por completo todo lo que sabía, e incluso le dio el mensaje que debía entregar, para comunicárselo al rey Herodes. Este mensajero volvió a Egipto, sin saber ni comprender nada más. También San Miguel se dirigió a las autoridades del lugar donde estábamos, y con el toque de Su Mano borró en sus mentes todo lo que sabían de Nosotros. De este modo, pudimos permanecer en Egipto algún tiempo más, pero mi Corazón sufrió mucho en aquellos días en que aquellas autoridades decidieron revelar a Herodes dónde nos encontrábamos, sobre todo, mi Corazón sufrió mucho en aquellos días en que el mensajero se dirigía a Tierra Santa. Todo esto lo ofrecí por ti, hijo Mío, así que: ¡No temas! Yo, que siempre te he amado, nunca te abandonaré. Te bendigo y bendigo a todos mis amados hijos ahora y sobre todos, una vez más, y sobre vosotros extiendo mi Manto de Luz, Amor y Paz.