domingo, 11 de febrero de 2018

Fiesta de Nuestra Señora de Lourdes, Francia

Mi amado hijo, este es tu Jesús de amor y misericordia. Tu país necesita mucha misericordia ahora, pero para recibir mucha misericordia, tu país y tu mundo tienen que pedirla y dejar de pecar y empezar a vivir los Diez Mandamientos. Hace un tiempo te dije que las puertas del arca se estaban cerrando en tu tiempo en la tierra igual que en el tiempo de Noé en la tierra a causa de los pecados de la carne. Luego leísteis en los mensajes del Amor Santo que el 10 de enero les dije que las puertas del arca en tiempos de Noé se habían cerrado. Desde el 11 de febrero llevan 31 días cerradas. Eso os da 9 días más antes de que el agua cubriera la tierra en tiempos de Noé. Esto debería despertar a la gente de la tierra que está dormida. Os dije en uno de vuestros últimos mensajes que Mi mano estaba cayendo hacia la tierra cada día más y que cuanto más cayera más desastres naturales y peores desastres veríais hasta que la gente de la tierra empezara a rezar más y empezara a seguir los Diez Mandamientos.

El Presidente y el Vicepresidente están escuchando, pero tu Congreso y tu Senado hacen poco, salvo pelearse entre sí la mayor parte del tiempo. Te lo dije, tu tiempo como pais y mundo se estaba acabando tal y como lo ves y lo sabes, y empezarias a vivir como un pais del 3er mundo. Muy poco ha cambiado en cuanto a los pecados de la carne, pero ahora se reza más, pero en su mayoría proviene de la misma gente. Tiene que haber mucha mas oracion de mas gente o vereis muchos mas desastres y mucho mas daño y perdida de vidas hasta que la mayoria de la gente este de rodillas orando. Pronto podríais ir a los refugios si no se reza más y más gente estará en peligro de perder la vida debido a los desastres naturales y a los ataques terroristas.

Os estoy diciendo lo que está ocurriendo en vuestro mundo en este momento de la historia. Te estoy diciendo lo que ocurrió en el tiempo de Noé en la historia, como le dije, pero muy pocos escucharon hasta que fue demasiado tarde. Querían todo lo que deseaban cuando lo deseaban y perdieron todo lo que tenían. Te estoy diciendo que estás muy cerca de la misma situación en la que estuvo Noé durante su tiempo en la tierra. ¿Vas a seguir tomando las mismas decisiones y siguiendo a satanás y perder el Cielo para toda la eternidad por unos pocos placeres de la carne que te llevarán al infierno? ¿O cambiarás tu vida de la enfermedad y el pecado a la alegría y el amor de Dios en el Cielo? La elección es vuestra, hijos míos. Te di libre albedrío para que no tuvieras que vivir como un esclavo, pero has elegido la esclavitud por el bien de satanás que te llevará al infierno por toda la eternidad si no cambias muy pronto.

Mis hijos se preguntan por qué repito las cosas una y otra vez tantas veces. Así es como se aprende, haciendo las cosas una y otra vez y viendo las cosas una y otra vez. ¿No veis cómo satanás consigue que seáis sus esclavos y adictos a los pecados de la carne? Te muestra los pecados de la carne en las películas, en la televisión y en las canciones. Oyendo y viendo el mal, te vuelves muy malo al cabo de poco tiempo. Pero, al estar cerca de una buena persona o de un grupo de buenas personas, te conviertes en una buena persona viendo buenas películas o buenos programas, escuchando buena música o yendo a la iglesia.

Todo lo que hace satanás viene de Dios porque satanás aprendió de Dios. Satanás coge todo lo bueno y le da la vuelta. Pone palabras malas en lugar de palabras buenas e imágenes de maldad y lujuria en lugar de imágenes buenas. Es tan simple como eso ser bueno o malo. Es tan sencillo como eso entre una persona buena y una mala. No puedes estar cerca de gente mala todo el tiempo sin mucha oración y gracias de Dios para seguir siendo bueno. No puedes estar cerca de gente buena todo el tiempo y no llegar a ser como ellos. Observa cómo reacciona la gente cuando habla entre sí. Estarán de acuerdo con lo que dicen los demás en lugar de defender sus propias creencias. Cuando la gente trabaja y reza con mucha gente buena, aprende a defender a Cristo en lugar de permitir que los demás sigan ignorantes en sus costumbres pecaminosas. Amor, tu Jesús de amor y misericordia.