martes, 21 de noviembre de 2017

Llamada urgente de Jesús Sacramentado a la humanidad.

La Ideología De Género Está Destruyendo A Los Niños Y A Los Jóvenes.

Hijos míos, Mi paz sea con vosotros.

Pequeños, la ideología de género está destruyendo tanto a los niños como a los jóvenes en muchos países. Esta doctrina del maligno se está inculcando en jardines de infancia, escuelas y universidades; se os está inyectando el veneno de la homosexualidad, el lesbianismo y otras impurezas.

A los niños y jóvenes se les enseña que no existe el género, que se nace con ambos sexos, que se puede ser hombre y mujer al mismo tiempo y viceversa.

Todo este engaño de la ideología de género está llevando a los niños y jóvenes a tener comportamientos y personalidades andróginos, creando en ellos dudas y confusiones en su sexualidad.

Recuerda lo que dice Mi Palabra:

Dios creó al hombre a Su imagen, a imagen de Dios lo creó, varón y hembra los creó. (Génesis 1.27)

Creé al hombre y a la mujer física, psicológica y sexualmente diferentes. Establecí entre ellos diferencias morfológicas, psicológicas y sexuales; llamé al hombre Adán y a la mujer Eva; con ello di origen al género masculino y femenino.

Los creé hombre y mujer, los bendije y les dije Sed fecundos y multiplicaos, poblad la tierra y sometedla. (Génesis 1. 28)

Yo no creé a los homosexuales, ni a las lesbianas, la homosexualidad y el lesbianismo, son obra del maligno; son espíritus impuros que entran en las generaciones a través del pecado de sodomía en el que han incurrido vuestros antepasados. Estos espíritus pasan de generación en generación, hasta que las generaciones se liberan, mediante la oración y los exorcismos.

Toda la impureza sexual en (cualesquiera) generaciones es obra del demonio.

Mi adversario os conoce y sabe que la mayor debilidad del hombre es la carne y es a través de la carne por donde entran los espíritus de impureza. Para estos tiempos finales, mi adversario a través de sus emisarios quiere implantar en la infancia y en la juventud, toda práctica de impureza sexual, con la llamada: Ideología de Género.

Pretende con ello que en las sociedades futuras, no existan sociedades matrimoniales constituidas por hombre y mujer, unidos por el sagrado vínculo del matrimonio. Mi adversario quiere destruir la familia constituida por el hombre, la mujer y los hijos.

Con la ideología de género que inventaron los gobernantes y las élites Illuminati, lo que se persigue es acabar con el vínculo del matrimonio que tiene Mi bendición. Porque saben que en él se constituye la primera sociedad creada por Dios, de la que procede toda la fuerza espiritual que destruirá mañana mediante la oración los planes y el reinado de Mi adversario.

El poder de la oración de las familias que tienen mi bendición será un sonido de trompetas que derrumbará en estos tiempos finales, los muros y fortalezas del maligno.

Hijos míos, permaneced unidos en la oración, amándoos y ayudándoos unos a otros; convirtiendo vuestros hogares en fortalezas espirituales, porque se acercan los días del gran combate espiritual. Cada revés y sufrimiento que tengáis, llevadlo con amor y ofrecedlo por vuestra conversión y por la de vuestras familias.

Os digo esto, porque mi adversario ha empezado a atacar los hogares de los matrimonios unidos con mi bendición. Está creando división y confusión en las familias, para separarlas; así se cumple lo que dice mi Palabra:

Cinco serán divididos en una casa, tres contra dos y dos contra tres. El padre estará dividido contra el hijo y el hijo contra el padre, la madre contra la hija y la hija contra la madre, la suegra contra la nuera y la nuera contra la suegra (Lucas 12. 52, 53).

Rezad, pues, por vuestros matrimonios y familias; el ayuno, la oración y la penitencia serán el antídoto que fortalezca vuestros hogares.

Hijos míos, reprended a los espíritus de división y llevadlos a Mis Santísimas Llagas. El poder de mis Llagas destruirá estos espíritus y fortalecerá vuestros hogares y familias.

Tened presentes estas instrucciones que os doy, para que nada os pille por sorpresa. La paz os dejo, mi paz os doy.

Arrepentíos y convertíos, porque el Reino de Dios está cerca.

Vuestro Maestro, Jesús Sacramentado

Que mis mensajes sean conocidos, hijos míos, por toda la humanidad.