domingo, 6 de mayo de 2018

Capilla de la Adoración

Hola, amadísimo Jesús siempre presente en el Santísimo Sacramento. Alabado seas, mi Señor y mi Dios. Gracias por la Santa Misa de esta mañana y por la Santa Comunión. La Misa ha sido hermosa como siempre, Jesús. Señor, quédate con el Padre de una manera especial (circunstancias no reveladas). Señor, que se haga Tu Voluntad. Consuela a Tus sacerdotes, por favor Jesús. Sé que están muy cerca de Tu Sagrado Corazón. Jesús, elevo a todos los enfermos, especialmente a los moribundos. Por favor, confórtalos y consuélalos. Ayúdales a darte su «sí» a Ti. Ayúdales a creer y a confiar en Ti. Rezo por (nombre oculto) que se está muriendo. Lleva su alma al Cielo, Jesús. Por favor, consuela a (nombre oculto y a su familia). Ayuda a todos los que han sido operados a recuperarse totalmente. Jesús, por favor, acompaña a (nombre oculto) mañana durante su operación. Ayúdala a combatir las infecciones, Señor, para que pueda someterse a la operación necesaria. Tiene mucho dolor, Jesús. Por favor, alivia sus molestias. Señor, también rezo por el fin de la violencia, por la paz en el mundo y en nuestros corazones. Derrama Tu Espíritu Santo y renueva la tierra, Jesús. Ayuda a los que no Te conocen a experimentar Tu amor. Te ruego por nuestro país, Jesús, para que volvamos nuestros corazones hacia Ti una vez más. Trae al redil a las almas que están fuera de la Iglesia. Que todos seamos uno, Jesús tal como Tú oraste.

Jesús, ¿tienes algo que decir hoy?

«Sí, hijita Mía, tengo mucho trabajo para ti. Difunde Mi amor, Mi gracia a todos los que encuentres. Lleva Mi paz y Mi misericordia a los demás. Haz de cada encuentro con los demás, un momento de encuentro Conmigo. Dales Mi amor. Yo te dirigiré cuando no sepas qué decir. Yo estaré contigo. Invítame a cada encuentro, hija Mía. Hay mucho que hacer por el Reino. No te angusties por el alcance de la responsabilidad. No es demasiado para Mí. Yo abriré puertas y te llevaré adonde Yo quiera que vayas. Podrás cruzar muchas zonas y reunirte con diversas personas a las que otros no tienen acceso. Sé Mi embajador, Mi corderito».

Sí, Jesús. Gracias, Señor.

«Hija mía, el trabajo que tengo para ti no será demasiado difícil. No te abrumará. Recuerda que dije que no preparo a Mis hijos para el fracaso. Tráemelo todo y trabajaremos juntos. El verdadero trabajo es ser amor para los demás. Concéntrate en esto. Sé amor a través del servicio, hija Mía».

Gracias, Señor. Me tranquiliza saber que Tú estás conmigo y trabajando, incluso ahora, antes de empezar este nuevo proyecto. Confío en Ti, Señor. Será emocionante ver lo que Tú tienes reservado en este nuevo empeño.

«Hija mía, este mes hay mucho en juego en el mundo. Reza por la paz. Reza por los dirigentes de las naciones. Ofrece sacrificios por tus hermanos y hermanas perdidos y por los que son perseguidos por Mi causa. Reza por la conversión de las almas perdidas y de corazón duro que están lejos de Mí».

De acuerdo, Jesús. Rezaremos.

Jesús, gracias por este tiempo de paz y tranquilidad. Es justo lo que necesitaba. Es muy bueno estar hoy aquí contigo. Estoy agradecida por esta Capilla de Adoración. Señor, dirígenos con respecto a nuestro próximo movimiento y ayúdanos a saber dónde quieres que estemos.

«Hijo mío, medita en Mi pasión y muerte. Concéntrate en Mi acto salvífico para el mundo. Vine a redimir a toda la humanidad. Ruega para que esta redención sea deseada en los corazones de los hombres. No quiero que se pierda ni una sola alma, así que reza».

Sí, Jesús. Gracias. Jesús, Tú dijiste que todo lo que Te pidamos durante la hora de las 3:00 Tú lo concederás. Te ofrezco la Coronilla de la Divina Misericordia que he rezado hoy por la paz y por los que no Te conocen y no Te aman. Rezo por la conversión y para que todas las personas deseen la redención y la salvación, que sólo Tú ofreces. Por favor, que así sea, Señor.

«Te amo, hija Mía. Eres preciosa para Mí. En cuanto a tus preocupaciones, espera en Mí y confía en Mí. Yo actúo incluso cuando tú no ves ni comprendes. Sabed que Mi plan se llevará a cabo respecto a vuestro pastor. Esta dificultad, esta cruz parece pesada ahora, pero con el tiempo él comprenderá la sabiduría de Mi plan. Hija Mía, la comodidad no es el objetivo de Mis discípulos, sino hacer la obra de Dios, servir donde se necesita servicio y obediencia. Mis santos hijos sacerdotes son necesarios en muchas regiones del mundo y sus dones específicos se utilizan donde Yo quiero. Yo trabajo a través de Mi Iglesia y cuando algunos hacen su propia voluntad, Yo trabajo a través de ella para bien. Recuerda, estoy moldeando y formando almas para el Reino; no para este mundo, sino para el Reino celestial. Confía en Mí».

Sí, Jesús. Confío en Ti. Ayuda a aliviar las heridas causadas por la decepción, Señor. Sé que Tu plan es mucho más grande que cualquier cosa que veamos en términos humanos. Que se haga siempre Tu Santa Voluntad, Jesús. Señor, por favor, guía y dirige a los que se gradúan en el instituto y en la universidad. Mantenlos a salvo de cualquier daño; daño espiritual, emocional y físico. Acompaña a los seminaristas, Señor, y a (nombre oculto) cuando se gradúe en el seminario menor e ingrese en el mayor. Gracias por nuestros sacerdotes, hermanos y religiosos.

«Sé bienvenida, hija mía. Conozco tus planes para hoy y para la semana que tienes por delante. Ve ahora en Mi paz y en Mi amor. Te bendigo en nombre de Mi Padre, en Mi nombre y en nombre de Mi Espíritu Santo. Sed amor, sed misericordia, sed alegría para todos los que encontréis. Así, los corazones se abrirán para recibir la Buena Nueva de tu Jesús».

Gracias, Señor. Te amo.

«Y Yo te amo a ti, hijita Mía».