domingo, 16 de abril de 2017

Capilla de la Adoración, Domingo de Pascua

Hola, Jesús presente en el Santísimo Sacramento del Altar. ¡Feliz Pascua de Resurrección! Gracias por la Santa Misa en esta solemnidad de todas las solemnidades. Te adoro, Jesús y Te alabo, porque por Tu santa cruz has redimido al mundo. Gracias por redimirnos, mi Salvador. Por Tu muerte y resurrección, abriste las puertas del Cielo a la humanidad. Gracias, Jesús, Hijo de Dios e Hijo del hombre.

Estoy muy contento de estar aquí contigo, Señor, en este gran día de fiesta. Jesús, gracias por el tiempo que pasamos con (nombre retenido) la semana pasada. Gracias por el tiempo pasado con (nombres no revelados). Son queridas mujeres de Dios, Señor. Fue un placer conocer a (nombre oculto) y rezar con ella. Rezo para que (nombres ocultos) pueda conocerla algún día. Eres tan bueno conmigo, Jesús, que traes a mi vida personas tan hermosas. ¡Alabado seas, Señor!

«Eres bienvenida, hija mía. Me encanta reunir a Mis Hijos de la Luz. Soy el gran 'unificador'».

Sí, Jesús. Tú eres el Señor Dios que une a los que Te aman y Te sirven. Tú eres el Príncipe de la Paz. Por favor, une a todos Tus hijos en Tu Sagrado Corazón.

«Ese es Mi deseo, hijita Mía. Hija Mía, por favor, dile a Mi hijo (nombre oculto) que no se preocupe. Le pido que no tema, sino que confíe en Mí. Debe rezarme y traerme cada problema, cada decisión. Yo le mostraré el camino. Lo que se necesita es confianza. Busca Mi Voluntad, Mi (nombre oculto). Yo te guiaré. Escúchame en lo más profundo de tu corazón. Yo envío a tus amigos para que te aconsejen y estoy aquí para ti. Reza con tus propias palabras desde lo más profundo de tu corazón y luego cállate y escucha Mi voz quieta, pequeña y tranquila. Yo te guiaré. Yo dirijo tus pasos. No temas, sino confía».

Jesús, (nombre oculto) está buscando Tu dirección respecto a si debe someterse o no a la intervención. No creo que tenga tanto miedo como que quiera tomar la decisión correcta. Es difícil cuando hay información y consejos contradictorios. (Nombre oculto) ha dicho que no hay tiempo suficiente, y aunque creo que sé lo que quiere decir, tiene programada la intervención en menos de 2 semanas. Por favor, oriéntale o facilítale a alguien que pueda darle información suficiente para que sepa cuál es la mejor decisión. Puedo aceptar lo que haga, pero él está luchando de verdad con esto, Jesús. Por favor, ayúdale a ver claramente el camino que Tú quieres que siga. Tú lo sabes todo, Señor, pero nosotros apenas podemos vernos las manos delante de la cara con nuestros ojos humanos.

«Sí, hijo mío. Comprendo y sé cómo está luchando Mi hijo (nombre oculto). Le daré la información que busca, pero necesitará confianza. La confianza es lo que más Me agrada y eso es lo que le pido a él y a ti. ¿No hablé a través de Mi hijo sacerdote para mostrarle claramente cómo escucharme? Es en Mi Corazón Eucarístico donde verá con más claridad».

De acuerdo. ¡Gracias, Jesús! ¡Eres muy misericordioso y bondadoso, Señor! Jesús, ¡me alegra tener aquí a (nombres ocultos) para rendirte homenaje en el día de Tu santa fiesta! Por favor, dales gracias, Señor, por estar aquí. (Nombre oculto) parece un poco desanimado, Jesús. Por favor, derrama Tus gracias sobre él.

Señor, parece que el mundo está sumido en el mismo caos e inquietud que en octubre o noviembre del año pasado. Muchos países se preparan para la guerra. Hay muy poca paz, Jesús. Parece que hemos vuelto al punto de partida y nuestro Presidente, que hizo campaña sobre «América primero», centrándose en reconstruir nuestro país y no en ir a la guerra, ha hecho precisamente eso. Parece estar escuchando a la gente que dijo que era corrupta y en lugar de drenar el pantano, está nadando con los caimanes. Jesús, ¿es esto cierto o me equivoco? Espero equivocarme, pero parece estar cambiando de opinión. Primero dijo que sería amigo de Rusia y que no consentiría los acuerdos comerciales injustos con China que tenemos en vigor, ya que son tan parciales con China y nos están perjudicando económicamente, y ahora está bombardeando Siria contra nuestros «aliados» rusos golpeando al presidente sirio elegido democráticamente como para derrocar a su gobierno que está luchando contra el Isis y parece que se está haciendo amigo del presidente comunista chino. No entiendo esto, Jesús. Creía que Tú habías ayudado a ponerle en el cargo. ¿Me he equivocado? ¿Ha cambiado o estoy interpretando mal las cosas? Sé que las cosas no son a menudo lo que parecen, pero él ha cambiado filosóficamente de una manera muy grande.

«Hija mía, respondí a las oraciones de Mis hijos cuando Trump se presentaba al cargo de Presidente. Ha cambiado sus puntos de vista y tienes razón en tus observaciones. Reza por él. Está sometido a mucha presión y escucha malos consejos, pues confía en las personas equivocadas. Las cosas no son lo que parecen, pues son mucho peores. Hay muchos lobos a su alrededor e incluso aquellos en los que creía que podía confiar no tienen en mente los intereses de América, sino los siniestros planes del orden mundial único que Mi adversario está detrás. Los tiempos que estáis viviendo son muy peligrosos y por eso debéis rezar el Santo Rosario y la Coronilla de la Divina Misericordia todos los días. Rezad también por la noche el rosario familiar. Si todos Mis hijos que Me aman y Me siguen rezaran el rosario por las intenciones de Mi Santísima Madre, Mi misericordia inundaría la tierra y el Corazón Inmaculado de Mi Madre triunfaría antes. Lamentablemente, sin embargo, serán pocos los hijos Míos que respondan a Mis súplicas, pues Mis hijos buscan entretenimiento y placer. Prefieren ver acontecimientos deportivos y la televisión que dedicar una hora a la oración».

«Hijos, vuestras vidas dependen de la oración y, sin embargo, iréis a la tumba entretenidos hasta la muerte. Prestad atención a Mi advertencia, porque el maligno busca devorar almas y muchos, muchos están adormecidos mientras el ladrón acecha vuestra casa y está listo para entrar; todo el tiempo hay ruido atronador en vuestros hogares y camináis aturdidos completamente insensibles a la oscuridad espiritual que os rodea. Despertad, hijos Míos. Volved a los Sacramentos y permaneced en estado de gracia. Si Me buscáis, Me encontraréis. Si Me abrís vuestros corazones, os daré Mi misericordia, perdón, amor y dirección. Los tiempos son inseguros y oscuros. No saldrías de casa para hacer un viaje sin tomar las indicaciones para localizar tu destino y, sin embargo, atraviesas los peligros de la vida sin una hoja de ruta espiritual. Lee la Sagrada Escritura. Vuelve a Mi Iglesia y a los Sacramentos para que tengas gracia y sabiduría. Os digo esto porque os amo y no me gusta ver a Mis hijos dando vueltas, perdidos en las tinieblas e ignorantes de las trampas que Mi adversario os ha tendido. Estoy cerca de vosotros con Mi luz, Mi vida, Mi amor. Estoy dispuesto a guiaros para que un día estéis a salvo Conmigo en el Cielo. Por favor, hijos, no esperéis demasiado, pues no conocéis el día ni la hora en que vuestra vida será requerida. Venid a Mí mientras aún hay tiempo, Mis amados hijos».

Jesús, por favor, abre los corazones a Tu misericordia y a Tu gracia. Ayuda a mis hermanos y hermanas a experimentar Tu amor, Tu bondad y Tu misericordia. Tú eres todo bondad, Jesús. Eres amable y amoroso. Si sólo Te conocieran, Jesús, Te amarían. Por favor, abre los corazones de aquellos que no conocen el amor de Dios. Rezo especialmente por (nombres ocultos) que dicen que no creen en Dios. No lo entiendo, Jesús, pero por favor, quítales las anteojeras que llevan. Quítales las escamas de los ojos que les impiden ver la verdad que eres Tú, Jesús. Por favor, hazlo por todos los que no creen para que todos Tus hijos estén contigo en el Cielo algún día. Por favor, devuelve a (nombre oculto) a Tu santa Iglesia, Señor. Por favor, Jesús. Te la confío, Señor, como hago con cada ser querido. Tú los amas más de lo que yo puedo amarlos, Jesús, pues Tú eres todo amor y todo amor eres Tú.

«Hija mía, Yo soy digno de confianza. Yo guardaré sus pasos y les daré todo lo que necesiten. Si no regresan pronto, lo harán durante la Iluminación de la Conciencia, cuando Me revele plenamente a Mis hijos que viven en el mundo. Todos Me conocerán y se conocerán plenamente a sí mismos. Después no habrá excusas, pues todos conocerán la verdad, la realidad de Dios y las verdades de la fe. No tengáis miedo, sino esperad con gozosa esperanza. Permaneced en estado de gracia y así estaréis preparados para ayudar a las almas necesitadas. Habrá mucha gente que vendrá a Mis Hijos de la Luz después de la Iluminación. Vosotros, Mis hijos que permanecéis en Mi gracia, seréis como faros de luz para aquellos viajeros cansados que viajan en la tormenta y son incapaces de ver el camino que tienen por delante. Verán a las almas que están unidas a Mí y se volverán hacia vosotros en busca de guía. Tú les ayudarás y les guiarás hasta los sacerdotes que les darán los Sacramentos».

«Habrá una efusión de Mi Espíritu como en la Iglesia primitiva en Pentecostés y muchas almas entrarán en el Arca de Mi Santa Iglesia. Tú ayudarás a dirigir su rumbo. Serán despertadas de su sueño y estarán hambrientas de Mi verdad. Sed amables con estas almas, hijos Míos, porque serán muy vulnerables. Necesitarán Mi misericordia y vosotros debéis darles misericordia y amor. Guiadles, hijos Míos con la verdad, pero sed gentiles para que sanen y solidifiquen su relación Conmigo y con sus hermanos y hermanas. No les juzgues ni les reprendas, sino sé misericordioso. Camina con ellos, Mis Hijos de la Luz y condúcelos hacia Mí. Cuando uno de Mis hijos acuda a ti, temeroso y sintiéndose condenado, anímale. Háblales de Mi misericordia. Esto es imperativo hijos Míos, pues conocerán Mi misericordia y, sin embargo, empezarán a dudar. El maligno susurrará palabras de condena y les tentará para que pierdan el ánimo. Debéis contrarrestar estas tácticas diabólicas con el amor de Dios, la misericordia de Dios y con la sangre que derramé en el Calvario. Amo a todos Mis hijos, y volvería a morir por cada uno de ellos si fuera necesario. Como ya lo he hecho, no es necesario, pero lo haría de verdad si lo fuera. Deseo misericordia, hijos Míos. Dad misericordia y amor a las almas perdidas. Traedlas a Mí, hijos Míos y Yo haré el resto».

¡Gracias, Jesús, por Tu gran amor y misericordia! Todos somos pecadores, Señor, y todos necesitamos Tu misericordia. Danos la gracia de ser misericordiosos con los demás.

«Corderito mío, aunque es misericordia lo que deseo, también necesitarás decir la verdad. Enseña la verdad a las almas que acudan a ti. Es injusto florecer a la gente con sutilezas y hacerles creer que pueden continuar en su pecado. Lo que digo a Mis Hijos de la Luz es que sean misericordiosos. La verdad es misericordia, pero todos deben decir esta verdad con amor por el alma del otro. Algunos piensan que es amoroso ignorar el comportamiento pecaminoso y fingir que eso es amor. Hijos míos, abandonar a vuestros hermanos y hermanas en el pecado no es amor. No os ocultéis tras esta falsa noción de amor. Si alguien se estuviera ahogando en un lago y tú le felicitaras por su aspecto y le dijeras que está bien, sería ridículo, ¿no? Mientras tanto, la persona se está ahogando. Su vida está en juego y, en lugar de reconocerlo y lanzarte a salvarla, ¿crees que calmar su miedo y hacerle cumplidos cambia el hecho de que se esté ahogando? No, claro que no. Veis lo absurdo que es esto y, sin embargo, muchos de Mis hijos adoptan este enfoque con sus hermanos y hermanas que viven una vida de pecado. Esto no es amor, hijos míos. Es todo lo contrario».

«Me doy cuenta de que es incómodo decir la verdad a quien se ha extraviado, pero el verdadero amor se sacrifica y no cuenta el coste. ¿Qué teméis, Hijos Míos de la Luz? ¿Tenéis miedo de vuestra reputación? ¿Teméis que vuestra cultura impía os insulte o os etiquete? No temáis la persecución por Mi nombre, pues muriendo resucitaréis a la vida eterna. Debéis morir al yo, hijos míos, por amor. Amad a vuestros hermanos y hermanas que viven en las tinieblas, pues sus vidas dependen de ello. Debéis cooperar Conmigo para liberar a los prisioneros que están encadenados por el pecado. Debéis liberar a los oprimidos que no conocen la verdad, no conocen el amor y la fuente de toda vida. Cuento con vosotros, hijos Míos. Mi Padre cuenta con vosotros. Mi Santa Madre María cuenta con vosotros. Coged vuestra cruz y seguidme. Es hora de recordar vuestro Bautismo y que Yo os envío como pescadores de hombres. Hijos míos, ahora está en juego toda la humanidad. Ahora es el momento. Rezad como nunca antes habéis rezado. Yo os amo. Camino con vosotros. Estoy contigo y siempre estaré contigo. No dudes de Mí, especialmente cuando todo parezca oscuro, porque allí, en la oscuridad, Mi luz brillará en ti y a través de ti como nunca antes. Todo irá bien. Sed portadores del Evangelio. Sed portadores de vuestro Jesús, hijos Míos».

«Corderito mío, te quiero. Estamos entrando en un tiempo de mayor cercanía. Acércate aún más a Mi Corazón, hija Mía. Se acerca una nueva etapa en tu camino y no quiero que la temas, pues es un tiempo de confianza más profunda en Mí, tu Jesús. Trabajaré aún más en tu alma porque estos días lo requieren. Presentiste que esto se acercaba, hija Mía. Presentiste que te daría información importante, ¿verdad?».

Sí, Jesús. Intuía que Tú tendrías algo importante que decirme, pero no tenía ni idea de lo que podría ser. Pero como ya lo había sentido antes, no estaba segura.

«Sí, hijita Mía. Mi Espíritu incitó a tu alma en este sentido y te llamó suavemente para que vinieras a Mí en este día tan sagrado. Ahora estás en el desierto, hija Mía, pero te aseguro que no estás sola. Te he equipado bien y estás preparada. Ha llegado el momento, y debo prepararte rápidamente durante esta próxima fase de tu camino espiritual Conmigo, pues mucho se está desarrollando. Debes estar preparado para lo que está por venir. También estoy preparando a Mi hijo (nombre oculto) y por eso se necesita mucha confianza. Confía en la llave de Mi Sagrado Corazón y esta llave abrirá misterios indecibles. Deseo confianza y seguridad en Mi provisión para ti, así como en Mi provisión para todos Mis hijos. La confianza es la llave que abre Mi infinita misericordia. Ésta es la Era de la Misericordia, hija Mía, y el estado actual de las almas en este mundo es abismal, pero Mi misericordia reinará en los corazones de Mi pueblo a través de su confianza en Mí. Di Mi vida misma por Mis hijos. ¿Qué no es confiar?»

Tienes mucha razón, Jesús. Diste Tu vida, para que sepamos de Tu amor. No debería haber ninguna duda de que Tú nos amas, Jesús. Y como Tú eres Dios y nos amas, cuidarás de nosotros. Te amo, Jesús, y pongo mi confianza en Ti. Gracias, Jesús por amarme y por amar a mi familia y a todos Tus hijos del mundo. ¡Confío en Ti, Señor, y te doy gracias por darme esta gracia!

«De nada, hija Mía. Éste es Mi regalo para ti en éste, Mi día de fiesta. Recuerda este día, hija Mía. Pascua, 2017, el día del don de la confianza, dado por tu Jesús a Mi hija, Mi corderita».

Gracias, Señor Dios del universo y de toda la creación. Te estoy muy agradecida por este don tan hermoso y precioso. Ángel de la Guarda, por favor, guarda este precioso y valioso regalo y no dejes que le pase nada. Sé mi protector y protege mi corazón para que no pierda el don de la confianza que Jesús me ha dado.

¡Gracias, Señor! Jesús, creo que deberíamos irnos ya. (Nombre oculto) se está poniendo inquieto y no quiero que moleste a los demás.

«Estoy de acuerdo, pero me complace mucho que Mi pequeño (nombres ocultos) haya venido a visitarme. Les daré gracias por el amor y la misericordia y también por la perseverancia. Yo estoy con ellos. Estoy con vosotros. Vete ahora en paz, hija de Mi Sagrado Corazón. Te bendigo en nombre de Mi Padre, en Mi nombre y en nombre de Mi Espíritu Santo. Id en Mi paz, Mi misericordia y amor. Sed alegría, hijos Míos. Debéis confiar en Mí y mostrar a los demás cómo confiar. Ésta es la clave. Os amo».

Jesús, Te amo. Jesús, confío en Ti. Amén y ¡Aleluya! ¡Jesucristo ha resucitado hoy! Alabado seas, Jesús.