martes, 2 de octubre de 2018

Exorcismo muy fuerte, dictado por el Arcángel Miguel el 29.11.2011

Cada oración arroja al infierno a 50.000 (cincuenta mil) demonios, por lo que es necesario rezarla con la mayor frecuencia posible. Regalo de Dios a través del Santo Arcángel Miguel en el día de su fiesta. Se logran enormes liberaciones en nuestra nación y en el mundo.

"Oh Dios, Uno y Trino Tigre , Te suplico humildemente, por intercesión de la Santísima Virgen María, a través del Santo Arcángel Miguel, por la gran gracia, los poderes de las tinieblas en la tierra...... (llámese el país) y en el mundo entero, en memoria de los méritos de la Santa Pasión de nuestro Señor Jesucristo, de Su Sangre preciosa que derramó por nosotros, de Sus Santas Llagas, de Su agonía en la Cruz y de todos los sufrimientos durante Su Santa Pasión y toda la vida terrenal, de nuestro Señor y Salvador.

Te pedimos, Señor Jesucristo , que envíes a Tus Santos Ángeles para que arrojen a las fuerzas del mal al infierno, para que en la tierra...... (llámese la tierra) y en el mundo entero venga el Reino de Dios y la gracia de Dios se derrame en todos los corazones. Así la tierra...... se llene (llámese tierra) y todas las naciones del mundo de Tu paz.

Oh esposa y reina nuestra, Te suplicamos de todo corazón, envía a Tus Santos Ángeles para que arrojen las fuerzas al infierno y a todos los espíritus malignos que deben caer.

Santo Arcángel Miguel , Príncipe de la Hueste Celestial, Tú has recibido el encargo del Señor de llevar a cabo esta misión para que la gracia de Dios esté siempre con nosotros. Dirige a la Hueste Celestial para que los poderes de las tinieblas caigan en el infierno de una vez por todas.

Utiliza todos tus poderes para derrotar a Lucifer y a sus ángeles caídos, que se rebelaron contra la voluntad de Dios y ahora quieren destruir las almas de los hombres.

Sal victorioso, pues Tú tienes el poder, la autoridad y la intercesión por nosotros, la gracia de la paz y el amor de Dios, para que podamos seguir siempre a nuestro Señor en el reino de los cielos. Amén»